"Ojo con lo que imaginamos... porque nos determina demasiado.
En terapia se trabaja mucho sobre las "suposiciones" del paciente, lo que él imagina, las ideas que intercala adelantándose a hechos, los miedos que le dominan sobre cosas que ni siquiera han pasado, y otras que no son seguras, que no se han confirmado, los dramas que hay cuando la persona "adivina" lo que otros dicen de ella, las conjeturas que llevan a durísimas discusiones familiares, las sospechas inconsistentes, ...que se derivan en suposiciones y hasta definiciones en base a nada firme y claro.
Qué sentido tiene sufrir en base a lo que imaginamos?
Frenemos esa destructiva costumbre y bajemos al nivel real. Si queremos saber verdades no las supongamos: sepámoslas, confirmémoslas.
Muchas veces al investigar sobre aquello que suponemos nos sorprendemos de darnos cuenta del tremendo error que casi cometemos. En donde no solo sufriríamos nosotros sino que arrastraríamos a otros.
Actuemos con consciencia, con responsabilidad, con coherencia, con valentía, encaremos la verdad, si dudamos de algo enfrentemos esa duda ante las personas indicadas, las únicas que sabrían decirnos las cosas como son, no busquemos voces ni opiniones equivocadas.
A la hora de sufrir dejemos de imaginar, y sepamos la verdad"
Ps. Patricia Cabrera Sena
revisado por Miriam Alberganti
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